¿Quieres conocer más acerca de la novela literaria de Juan Rulfo, Diles que no me maten? Aquí te traemos un corto Resumen de Diles que no me maten, para que puedas tener una breve idea de los que trata este libro. Aún así, podrás conocer la enseñanza, personajes y datos importantes que se encuentran dentro de ella.
¡Sigue leyendo para conocer todo sobre el Resumen de Diles que no me maten!
TABLA DE CONTENIDO
Resumen corto de Diles que no me maten
La historia Diles que no me maten de Juan Rulfo comienza con un discurso entre padre e hijo; en el que el anterior grita a su posteridad Justino que intervenga por su vida, ante los individuos que necesitan acabar con ella.
Así, con la súplica «Revelarles que no me maten«, este denunciado plantea la petición ante su hijo, pidiéndole que acuda a sus asesinos;mientras que el último no parece muy convencido de la necesidad de ayudar a su papá.
Temiendo por su propia vida, ya que siente la obligación de asegurarla, especialmente para su pareja y sus ocho hijos. Sea como fuere, después de una larga negativa; Justino consiente en ir a intervenir por su papá, e ir ante sus asesinos para pedirles por favor que no lo maten.
De la misma manera, un narrador omnisciente asume la responsabilidad de la historia para describir cómo el hombre ahora denunciado fue llevado por sus captores rápidamente hacia el comienzo del día; por lo que, en general, se eligió atarlo a un árbol.
Además, el narrador comienza a retratar la horrible miseria que siente el hombre atrapado, que pidió no importa qué para proteger su vida.
De igual manera, este hombre, en medio de su encarcelamiento, comienza a reflexionar, prácticamente en shock, de cómo un tema que para él estaba cubierto por la pesadez del tiempo, lo había frecuentado durante ese tiempo por casi cuarenta años.
Se trataba del homicidio de su compadre Lupe, Don Lupe Terreros, que también era propietario de Puerta Piedra, y que en todo caso, al percibir cómo se mantenían las criaturas del ahora condenado y encima de que siendo su compadre;rechazó constantemente para ofrecerle una ayuda, permitiendo a los monstruos rozar sus territorios.
Ni siquiera -recordó el hombre, ahora sujeto a un árbol- después de la estación seca, a don Lupe pareció importarle que las criaturas de su compadre patearan el balde individualmente. Sin embargo, no iba a permitir que eso sucediera, por lo que buscó un camino y descubrió cómo abrir la cerca para que sus criaturas pudieran comer, ya que su desaparición sugería la de su familia, debido al apetito real.
Así fueron las cosas, por un tiempo, recordó el hombre angustiado por su juicio rompiendo y arreglando el cerco que impedía la entrada de las criaturas del hombre a los campos de los territorios de Don Lupe.
Sea como fuere, las actividades pasarían a gritos y a gritos a peligros. Un buen día, Don Lupe le dijo al hombre -quien descubre inesperadamente su nombre: Juvencio- que en caso de que volviera a ver a una criatura suya en su territorio, la mataría.
El hombre, Juvencio, parecía inquebrantable. Por su peligro, Don Lupe ejecutó un toro joven. La siguiente parte de la historia relata cómo Juvencio necesitó permanecer en aislamiento durante mucho tiempo, ya que ni los animales lecheros que le proporcionó al adjudicatario, ni la prohibición de su casa pudieron cubrir su fianza por la fechoría que había presentado.
Lo perdió todo, ya que los demás aprovecharon sus condiciones para llevárselo. Terminó dejándolo todo y yendo con su hijo a vivir a Palo de Venado.
A los 35 años, viejo y pegado a un árbol, no veía cómo ese tema volvía al presente para entregar retribución, si cuando había masacrado a Don Lupe solo tenía una esposa y dos jóvenes que estaban en el suelo.
En un breve lapso de tiempo la dama pasó de la tristeza y los jóvenes fueron trasladados con familiares. Sea como fuere, no hubo – revisa el hombre – una instantánea de armonía en su vida, escapando continuamente, escondiéndose en las montañas, y sin tener la opción de bajar al pueblo, sin importar si necesita buscar. para su pareja, cuando ella se lo entregue.
Manteniendo la vida, fue encontrado por los guerreros que fueron a buscarlo y lo llevaron por calles polvorientas hasta una entrada, donde había alguien adentro, con quien conversaba. Era un peto que buscaba al Juvencio Nava, de Alima, que había matado a Don Lupe.
Ya que era su papá, sin quien había necesitado crecer, con el argumento de que alguien lo había matado de la manera más despiadada que se podía imaginar, y estaba en ese momento para pagar.
Juvencio tuvo la oportunidad de pedirle que no lo ejecutara, mucho menos por ser un anciano apegado a la vida. Acaba de hacer que el ahora General solicite que sus hombres lo aplasten para que los disparos no lo lastimen.
Por su parte, Juvencio, quien anticipó que su hijo intervendría por él, apenas logró la armonía luego de que se cumplió la solicitud. Fue el momento en que su hijo regresó, lo montó en el burro y lo llevó a su casa, para que ella pudiera cuidarlo con su media naranja y ocho de sus hijos.
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Personajes
- Juvencio Nava protagonista principal fue quien mato a Don Guadalupe Terrenos su amigo y compadre. Este personaje es un hombre ya bastante mayor; en donde se muestra el miedo a la muerte cercana, pero que aun así no siente ningún tipo de de arrepentimiento, de lo que hizo.
- Justino Nava el Hijo, quien a pesar del amor que siente hacia su padre, tiene miedo de interceder por el para que tampoco lo maten.
- Don Guadalupe Terrenos era el compadre y amigo de Justino Nava, y quien resulta muerto a machetazos por este por una pelea por tierras donde pastaba el ganado.
- El coronel: este personaje es el hijo de Don Guadalupe Terrenos quien vuelve después de muchos años a hacer justicia por la muerte de su padre, y en donde se refleja el sentimiento de perdida y el resentimiento de haber vivido sin una figura paterna a su lado.
Tenga en cuenta que:
El juego que hace el autor de cambiar de narrador o ver la perspectiva de cada personaje libremente hace que este trabajo sea especial. El discurso utilizado, las representaciones y cómo el personaje principal revisa la totalidad de su pasado y descubre cómo unir todos los métodos de ver a Juvencio, el niño, el coronel y el narrador que es como un observador de lo que ocurrirá en particular.
la forma en que el creador media como narrador es como la forma en que Ernets Hemingmay describió. Oraciones breves y exactas, jerga básica para comprender, la investigación del cerebro utilizada en los personajes aclara la trama sin entrar en la parte mental de ellos.
Rulfo intentó mostrar al hombre perdurable de la vida cmpesina mexicana, el tormento de un hombre por haber asesinado a su compañero y compadre, la batalla interior de ese hombre escapando durante mucho tiempo de ese duro pasado y el pavor de ser encontrado y expuesto a él.
La equidad, el abandono de su pareja y el ansia de seguir vivo, se refleja cuando le pide a su hijo que hable con el Coronel y le dice: ¡Diles que no me maten!
La forma en que su hijo lo acompaña a su ejecución, sin embargo, no tiene ningún deseo de interceder; al igual que cuando negó a Jesús, solo por temor a que lo mataran, que tenía cónyuge y ocho hijos, hacen este desapego; la diferenciación con la forma en que el Coronel se sintió abandonado y solo al crecer con la desaparición de su papá y le aconseja:
«Es algo molesto crecer dándose cuenta de que lo que podemos arrebatar de raíz está muerto».
Sin embargo, incapaz de perdonar lo que hizo Juvencio, ofrece una pizca de simpatía cuando aconseja a los soldados que consuman a la vieja pareja de alcohólicos que no siente agonía cuando le dispara.
Análisis
Denominado Diles que no me maten, este texto de relato es un relato, concebido de la pluma del ensayista mexicano Juan Rulfo, y que se recuerda por el libro El llano en llamas, distribuido sin precedentes en 1953, por el trabajo de publicación de el Fondo de Cultura Económica.
Como diferentes historias en El llano en llamas; las escenas secas de los terrenos mexicanos se vuelven a dibujar en las líneas de Diles que no me maten. De igual manera, descrito en el individuo principal, a través de una voz de observador y héroe.
Rulfo poco a poco presenta el tema de los contrastes de clases, los disturbios de los terrenos, la batalla por la equidad; al mismo tiempo que abre los puntos de corte para que la venganza puede alcanzar; cuando el hombre está convencido de que el arreglo es retribución.
En cuanto a la última idea, Rulfo parece necesitar comunicar con el argumento de esta historia el círculo ilimitado que crea la venganza; una inclinación que puede mantenerse durante bastante tiempo; siendo satisfecha de manera única hasta lograr su objetivo central, sin que esta importancia se fije las ocasiones que lo provocaron.
Por ejemplo con el Coronel de esta historia, que en cualquier caso; vengando el fallecimiento de su papá, no tendrá opción de arreglar el desamparo y la ausencia de raíces y solidez que le ha causado durante su vida el no tener una.
Por otra parte, el héroe también vivirá el dolor de sentir continuamente la venganza de aquellos a quienes ha dañado. En esta línea, surge un círculo sensacional donde nadie gana, salvo la muerte.
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Autor
Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaínonota 1 (Apulco, Jalisco,34 16 de mayo de 1917-Ciudad de México, 7 de enero de 1986); fue un escritor, guionista y fotógrafo mexicano, perteneciente a la Generación del 52.56.
Es considerado uno de los escritores latinoamericanos más importantes del siglo XX y de México. Su reputación se asienta en dos de sus tres obras narrativas:
El libro de cuentos El Llano en llamas, publicado en 1953, y su novela Pedro Páramo, publicada en 1955.68
En sus obra se presenta una combinación de realidad y fantasía; cuya acción se desarrolla en escenarios rurales y posteriores a la Revolución Mexicana. Caracterizado como una leyenda de México; Rulfo se reconocía como un individuo introvertido, tímido y enigmático. Era silencioso, realista, celoso de su intimidad, crítico y creativo.
Sus historias evidencian los aportes a la literatura hispanoamericana y mundial; en ellas muestra tradiciones cristianas e indígenas presentando diversas situaciones socioeconómicas de pueblos con carencia;, falta de oportunidades, soledad, guerra, relación entre la naturaleza y el hombre, formas de composición humana; ejemplos de relaciones entre el hombre y el mundo, realidades concretas y medioambientales.
Sus personajes representan y reflejan la tipicidad del lugar con sus grandes problemas socio-culturales, enhebrados con un mundo quimérico.
La obra de Rulfo, y sobre todo Pedro Páramo, es el parteaguas de la literatura mexicana que marca el fin de la novela revolucionaria; lo que permitió las experimentaciones narrativas; como es el caso de la generación de mediados del siglo XX en México o los escritores posteriores pertenecientes al boom latinoamericano
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